Las siglas SATE corresponden al Sistema de Aislamiento Térmico exterior. ¿En qué consiste? Muy fácil: Se basa en colocar material aislante térmico por la parte exterior de las fachadas, protegiéndolo y mejorando las propiedades de esta. En algunos casos, este aislante puede ser también acústico, por ejemplo añadiendo revestimientos en un acabado más decorativo o estético.
El material que coloquemos, se adhiere a la fachada mediante una fijación o adhesiva o mecánica, por ello hace de Sistema Aislante Térmico Exterior. Además, podemos utilizar distintos materiales y técnicas dependiendo del resultado que queramos lograr.
Principales ventajas:
- Ahorro energético y económico: ya que al aislar, reducirás el consumo de climatización y gas para mantener tu hogar a la temperatura adecuada.
- Acaba con los puentes térmicos: o lo que viene a ser lo mismo, una fuga de calor. Los puentes térmicos, son zonas de la envolvente de un edificio en las cuales se produce una transmisión de calor más fácil debida a una variación en la resistencia térmica de la envolvente. Este es uno de los principios por ejemplo, del modelo Passive House.
- Utilízalo en cualquier tipo de obra o reforma: este sistema permite incorporarlo en obras nuevas y conseguir un beneficio inicial del edificio, pero también en rehabilitaciones de edificios o reformas para mejorar la calidad de este.
- Aportan durabilidad extra: manteniendo la transpirabilidad del edificio.
¿Cómo contribuye a la eficiencia energética?
- Reduciendo la transmisión térmica a través de paredes exteriores y los costes de calefacción y enfriamiento en un 50% o más.
- Aumentando el confort tanto en climas cálidos como frío y la higiene del edificio, ayudando a prevenir la formación de moho.
En conclusión:
Revaloriza el valor de la vivienda, crea una atmósfera saludable, disfruta de un confort térmico y acústico y cuida el medio ambiente. Con ello, reducirás el consumo de climatización y gas para mantener tu hogar a la temperatura adecuada.